C.T.A. exige al vicepresidente de la Diputación, Presidente del Consejo de Administración de EPREMASA y a la nueva Gerente la destitución del Jefe de Personal o de Relaciones Laborales, por ser responsable del despido improcedente de un miembro del Comité de Empresa. Y nos vamos a explicar.
El trabajador en cuestión se incorpora a la empresa después de una baja, a mediados del mes de marzo del año 2022, un facultativo de la mutua, emite un informe como no acto para el trabajador en el mes de Julio y se lo hace llegar a la empresa. Hay que puntualizar que dicho facultativo no ve para nada a este trabajador. Y además que el trabajador venía desarrollando su trabajo con normalidad.
En el mes de Julio del 2022, el Gerente y el Jefe de Recursos Humanos deciden, separar a este trabajador del servicio, manteniéndole sus retribuciones, hasta el día 12 de diciembre, cuando la empresa entrega el despido a otro miembro del Comité de Empresa, en la cena de navidad de la empresa. No al Presidente del Comité de Empresa.
El trabajador recibe el despido, como no apto, por supuesta ineptitud sobrevenida para el trabajo, el día 4 de Enero del año del año 2023.
El Juzgado de lo Social condena a EPREMASA a pagar por un despido improcedente, más los salarios de tramitación desde que se produjo al despido hasta la fecha de la sentencia.
Hay que sumar las cuantías económicas de los más de seis meses de no darle trabajo efectivo.
Es decir, que el Sr. Jefe de Recursos Humanos ha gastado un dinero público, muy cuantioso en despedir un representante de los trabajadores. Representante de los trabajadores, que cuanto menos este Sr. tiene animadversión, al igual que a la mayoría del Comité de Empresa, por razones de tipo sindical simples, por ejemplo por pedir la fidelidad de las actas de las reuniones con la empresa.
No se puede consentir que empresas públicas amparen este tipo de situación, de responsables directivos que cometen acciones contra trabajadores o sindicalistas y que tienen ese tipo de prácticas. Y gastan el dinero público en despidos con esa alegría. Así que le pedimos a los actuales políticos que regeneren el funcionamiento de la empresa EPREMASA y depure con todas las consecuencias las responsabilidades a este directivo.